Nuestra dentadura


Higiene bucal

Nuestra dentadura desempeña una función clave en el aparato digestivo. Por ello debemos mantenerla en un perfecto estado. Las encías enrojecidas, inflamadas o que sangren pueden ser las primeras señales de gingivitis.


Es importante que usemos preferiblemente un dentífrico ecológico 100% natural, ya que los convencionales contienen sustancias (químicos) muy agresivas con nuestro pH bucal.

Nuestra boca es una de las partes más absorbentes del cuerpo entero, "una vía de alta velocidad hacia todos los sistemas de su cuerpo", así los productos químicos se absorben muy fácilmente en la cavidad oral. Es por esto que debe ser muy cuidadoso al elegir la pasta dental. Muchas marcas populares contienen ingredientes dudosos, que son mejor evitar.

Ingredientes perjudiciales como:

El flúor, suelen llevar la mayoría de los dentífricos a la venta. (Disminuye el yodo, afecta a la tiroides y al sistema central… (saber más…)

Triclosán (puede alterar la regulación hormonal), Cloruro de belzalconio Clorohexidina, una sopa química que suele estar presente en dentífricos y enjugues bucales, etc. Pueden producir irritación y favorecer la resistencia de las bacterias.

Lauril sulfato sódico, desengrasante que actúa como espumante, con propiedades abrasivas para la piel, destruye los lípidos naturales, puede secar la boca y causar úlceras bucales.


- Glicerina, Las pastas dentales que contienen glicerina son muy pegajosas, dejan una película residual, evitando que los dientes se remineralicen adecuadamente.

- Alcohol, reseca las membranas mucosas de la boca.


El sarro es una acumulación de sales sobre la superficie dental, la placa bacteriana se mineraliza (microorgaismos, saliva y restos de alimentos) y se deposita sobre las piezas dentales.

Causas más comunes del sarro:

El ácido de los alimentos refinados: azúcares, harinas, pastas y otros…

- Un consumo insuficiente de frutas y verduras crudas (su uso contribuye a la limpieza dental). 

Una insuficiente higiene bucal

Café, té negro y tabaco contribuyen a aumentar la porosidad del esmalte, haciendo que se acumulen pequeños restos de comida y se forme placa.

Una buena noticia ¡!!

Existen alimentos como las peras, manzanas, zanahorias, pepinos, coliflor, lechuga, brócoli y espinacas…, que, por su fibra y sus nutrientes, crean una película protectora en el esmalte de los dientes, evitando que se manchen.

Por otra parte, tenemos una gran variedad de plantas medicinales que nos pueden ayudar en casos de caries o gingivitis, podemos elegir Aceites esenciales, Vegetales, Aloe vera, hidrolatos de plantas, etc… con propiedades antibacterianas y antibióticas que ayudan a solucionar el problema, reduciendo la inflamación en la boca y la irritación en las encías, ayudando a solucionar el problema.

Por otra parte, tenemos una gran variedad de plantas medicinales que nos pueden ayudar en casos de caries o gingivitis, podemos elegir Aceites esenciales, Vegetales, Aloe vera, hidrolatos de plantas, etc… con propiedades antibacterianas y antibióticas que ayudan a solucionar el problema, reduciendo la inflamación en la boca y la irritación en las encías.



Colutorio


Todo lo anteriormente expuesto en cuanto al uso del dentífrico, es aplicable al uso del enjuague bucal o colutorio.

Buscamos un colutorio, bien cuando nos encontrarnos ante una infección localizada en la boca (aftas bucales, a menudo tras haber tomado antibióticos), bien cuando buscamos acabar con el mal aliento.

No obstante, los enjuagues bucales que encontramos a la venta, suelen contener alcohol, éste tiene un efecto caustico sobre los tejidos en la cavidad oral, y provoca excesiva sequedad en la boca, esto a su vez provoca un incremento de la actividad bacteriana…

Un enjuague bucal se considera más correcto cuanto más se acerque al pH de nuestra boca, que se encuentra en torno a siete (por debajo del 5,5 el esmalte de los dientes se desmineraliza y su estructura comienza a estropearse). 

Tanto si estamos buscando acabar con el mal aliento (bacterias), como si queremos curar una pequeña infección (aftas), disponemos de Materias primas 100% Naturales:

Agua de mar: Impide el desarrollo de bacterias, equilibra el Ph (la mayoría de enfermedades se padecen en un cuerpo con pH ácido) y ayuda a que se asimilen los minerales, combate el mal aliento, es un buen desinfectante para infecciones de boca y cicatrizante ideal para heridas en la mucosa bucal.

Los Hidrolatos (Menta, Salvia…) constituyen un enjuague muy útil para combatir las afecciones de los dientes y las encías: combinados con aceites esenciales ayudan a prevenir las caries, y a la vez, alivian y ayudan a curar las infecciones de encías, las aftas y el mal aliento.

Es muy recomendable usar los aceites esenciales en el enjuague bucal. El Arbol de té, Niaulí, Clavo, Limón, Jara, etc… poseen propiedades extraordinarias:

Antiinfeccioso, antibacteriano de gran espectro, antifúngico, antivírico, antiséptico, analgésico, antiinflamatorio, cicatrizante…